Ha vuelto a fallar. Y a la tercera va la vencida. De manera que no habrá comparecencia pública esta vez. El falso profeta estadounidense Harold Camping apenas puede hablar producto de un apoplejía sufrida en junio pasado y su última predicción sobre el fin del mundo, que preveía para el 21 de octubre pasado, le ha persuadido de que no vale la pena balbucear más incoherencias.
Así que este lunes no ofrecerá explicaciones a la numerosa audiencia de Family Radio, su cadena pastoral.
Tom Evans, amigo y vocero del pastor evangélico, declaró este sábado que Harold Camping necesita tiempo para “recuperarse” tras la decepción del Juicio Final y que se encuentra profundamente “desconcertado”. Además, ratificó que, de acuerdo a la esposa del religioso, éste no tiene ninguna intención de hablar o emitir un comunicado este lunes.
Evans, quien la pasada semana ratificó el Armagedón de Camping para el viernes, aseguró que personalmente piensa que al público se le debe una disculpa.
En 1994, Camping predijo el fin del mundo, y luego el pasado 21 de mayo, en medio de un despliegue publicitario que afectó las vidas y economías de muchos de sus seguidores. La predicción del pasado viernes 21 de octubre constituye su tercera profecía fallida.
“El Apocalipsis tendrá lugar muy, muy en silencio, probablemente el próximo 21 octubre”, había señalado Camping en un programa emitido en septiembre pasado. “Probablemente ninguna persona sufrirá dolor a causa de su rebelión contra Dios... Estamos cada vez más seguros de que van a morir en silencio y será el final de su historia”.
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